En medio del escándalo por «Chocolate», el Senado bonaerense sesiona por segunda vez en el año
Paralizados, sin nada para hacer y con el escándalo de «Chocolate» que crece en un silencio que aturde. Así se vive por estas horas en la Cámara de Diputados y del Senado de la provincia de Buenos Aires. ¿La buena? Hoy habrá sesión en este último recinto. ¿La mala? Es la segunda sesión ordinaria del año. Diputados viene peor, lo hizo solo una vez en lo que va del 2023.
Hoy el Senado abrirá sus puertas tras la última oportunidad que fue el 13 de abril. Tras más de cinco meses de inactividad se debatirá un temario que incluye la adhesión a la Ley Lucio y un proyecto de Educación Financiera para escuelas y con las vacantes judiciales fuera de agenda. En lo que será la segunda vez que los senadores buscarán aprobar iniciativas, se reproducen los proyectos de interés legislativo por aniversarios de localidades bonaerenses el «beneplácito» por conmemoraciones de fechas patrias.
A modo de ejemplo, la senadora Gabriela Demaría declara de interés legislativo el «International Surfing Day» a realizarse en Santa Teresita. Por su parte el senador Eduardo Bucca declara de interés legislativo el «vigésimo quinto aniversario del programa de televisión ‘Tercer Tiempo TV'». El senador David Abel Hirtz hizo su aporte: «Interés legislativo el 50° aniversario de la fiesta nacional de la cebada cervecera en Puán. Por último, el legislador Walter Torchio manifiesta su beneplácito por la realización del IV Encuentro de circo «Región de los vientos» en Carlos Casares.
En Diputados la situación es peor. Tras la única sesión ordinaria que fue el 12 de abril, no hubo más sesiones. Solo se reunieron el 1 de marzo para la apertura (obligatoria) y sesionaron de manera especial el 23 de marzo para repudiar el golpe militar de 1976. Esa fue toda la actividad dentro del recinto.
La actividad más impactante, en cambio, sucedió por fuera del Congreso. El 9 de septiembre detuvieron a Julio Segundo «Chocolate» Rigau en una sucursal del Banco Provincia. En su poder tenía 48 tarjetas de débito de empleados de la Legislatura y estaba retirando efectivo de cada una de ellas. Ante la sospecha, hubo un llamado al 911 y la policía lo detuvo. No quiso dar identidad ni mostrar lo que había dentro del bolso. Además de las tarjetas plásticas, que estaban guardadas cada una en sobres diferentes con los recibos de retiro, también se consignó que estos tenían en total $ 1.257.000 en efectivo, que habría logrado extraer de las tarjetas utilizando el límite diario de $ 30.000. Tras conocerse que era funcionario de la Cámara, la fiscal interviniente Betina Lacki ordenó el allanamiento de su casa, en donde secuestraron diversos documentos.
Sin embargo, la ayuda para «Chocolate» llegó pronto. 11 días después de la detención la Cámara de Apelaciones en lo Criminal de La Plata, dictado por los camaristas Juan Benavides y Alejandro Villordo, determinó que debía ser excarcelado y la causa, además, anulada. El único de los tres que votó en disidencia fue el camarista Fernando Mateos. Los camaristas platenses alegaron que la causa que investigaba la presunta defraudación en la Legislatura de parte del puntero del PJ tenía que caerse producto de un «mal desempeño» de los oficiales.
Fuente: Perfil