Recuerdo de hace 16 años: la victoria de Juan Martín del Potro en el US Open cambió el tenis argentino
Un eco del pasado en el tenis argentino
Han pasado dieciséis años desde que el grito de celebración de Juan Martín del Potro resonara en el Arthur Ashe Stadium. El tenista oriundo de Tandil, a sus 20 años, se llevó el codiciado trofeo del US Open 2009 tras una final memorable frente a Roger Federer, considerado el mejor tenista de todos los tiempos. Este triunfo, que se convirtió en el último Grand Slam ganado por un argentino hasta la fecha, representa un antes y un después en la historia del tenis en Argentina.
El camino hacia la gloria
Del Potro llegó a este prestigioso torneo como el número 6 en el ránking ATP, comenzando su andar ante su compatriota Juan Mónaco. La primera ronda fue contundente, ganando en sets seguidos con 6-3, 6-3 y 6-1.
Su siguiente encuentro se enfrentó al austriaco Jürgen Melzer, donde, después de un reñido primer set que ganó en el tie break, se impuso con otro doble 6-3.
En la tercera ronda, enfrentó a Daniel Köllerer, comenzando fuerte con un 6-1 pero cediendo el segundo set por 3-6. Sin embargo, se repuso y ganó el partido con dobles 6-3 en los sets finales, mostrando un tenis impresionante.
Pasando a octavos, Del Potro se encontró con el ex número uno del mundo, Juan Carlos Ferrero, a quien venció sin complicaciones, logrando otro triunfo en sets corridos, todos por 6-3. Su siguiente encuentro fue especial, ya que se enfrentó al croata Marin Cilic, un amigo de su juventud tenística. Después de perder el primer set 4-6, Del Potro mostró su mejor esfuerzo y ganó los siguientes sets con 6-3, 6-2 y 6-1.
La confrontación final
Con el argentino en la etapa de los mejores cuatro, le tocó medirse contra Rafael Nadal, mientras que en la otra semifinal Roger Federer luchaba contra Novak Djokovic. La semifinal fue un hito, donde Del Potro dejó atrás al español con un contundente triple 6-2.
El 14 de septiembre de 2009, ante un público de 23,735 personas, se desarrolló la gran final contra Roger Federer, quien había ganado el US Open cinco veces consecutivas y estaba invicto desde 2003. Al ser su primer enfrentamiento, la expectativa era alta. El primer set fue para el suizo, pero Del Potro no se rindió fácilmente y llegó a ganar el segundo en tie break por 7-6.
A pesar de que Federer se llevó el tercer set 6-4, el destino pareció sonreírle a Del Potro, quien nuevamente ganó en el tie break el cuarto set por 7-6, llevándolos a un emocionante quinto set. El ambiente en el estadio había cambiado a favor del argentino, que se encontraba firme y decidido. Tras empatar a 2-2, Del Potro desató su mejor tenis y concluyó el encuentro con un aplastante 6-2, provocando la caída del número uno.
Este triunfo, simbólico y memorable, catapultó a Del Potro al estrellato, consolidándose como un referente dentro del mundo del tenis y poniendo al tenis argentino en el mapa, un hecho que aún hoy se evoca con orgullo.
