La intervención del Tesoro en el mercado cambia las dinámicas cambiarias

Congreso de las americas junto a la Camara Argentina de Comercio y Servicios en el Hotel Alvear. 21.08.2025 Foto Maxi Failla
Intervención del Tesoro en un contexto de incertidumbre
En medio de la escalada del dólar, que el pasado lunes alcanzó su máximo histórico desde la eliminación del cepo cambiario, el Secretario de Finanzas, Pablo Quirno, anunció que el Tesoro intervendrá en el mercado para proporcionar un poco de liquidez.
Esta decisión marca un cambio radical en la estrategia que había implementado el Gobierno, que había decidido en abril que el dólar flotaría libremente dentro de un esquema de bandas cambiarias. El anuncio de Quirno pone fin a varias especulaciones que habían surgido en días recientes. Según publicaciones, se había detectado que el Tesoro había comenzado a vender dólares en las últimas ruedas de agosto para mitigar el impacto de la devaluación.
Reacciones del mercado
En el ámbito financiero, muchos analistas consideran que la señal emitida por el Gobierno es «mala y desprolija». Se menciona que esta acción se suma a una serie de errores cometidos por el equipo económico en las últimas seis semanas, que incluyen el fallido desarme de las LEFI a mediados de julio. Un operador de mercado comentó: «Rifan reputación por $ 80«, refiriéndose al comportamiento del tipo de cambio en relación al techo de la banda de flotación.
El analista Gabriel Caamaño Gómez, de la consultora Outlier, afirmó que el anuncio de Quirno constituye una «pésima señal» y pone en riesgo la estructura de bandas cambiarias establecida por el Gobierno tras la eliminación del cepo. «Las bandas ya estaban en crisis y con este anuncio las terminaron de liquidar», destacó. Según Caamaño, la intervención provocará una presión a la baja del tipo de cambio en el breve plazo, advirtiendo que si esto no sucede, la situación podría empeorar significativamente.
Perspectivas y desafíos
Martín Polo, de Cohen, coincidió en que la medida revela el temor del Gobierno hacia un dólar que flote sin control. Además, recordó que las bandas eran un mecanismo para evitar el uso indiscriminado de fondos del FMI. Desde el Ministerio de Economía se asegura que el organismo internacional ha dado luz verde para esta opción de intervención, en un contexto en el que el techo se sitúa en torno a los $ 1.466.
El Tesoro dispone de US$ 1.700 millones depositados en el Banco Central, acumulados a través de compras en bloque en meses anteriores. Sin embargo, su intención es vender esos dólares para proporcionar más liquidez al mercado cambiario en un ambiente de creciente incertidumbre política y económica. Caamaño advirtió que este «poder de fuego» es limitado, ya que debe enfrentar vencimientos de deuda en moneda extranjera, como los pagos al Fondo.
Por su parte, Pablo Repetto, de Aurum Valores, subrayó que esta intervención puede no afectar la credibilidad de la política de bandas, pero es indudablemente «una señal pésima». Otros analistas también señalaron que la administración demuestra una clara preocupación por el tipo de cambio, lo cual se traduce en intentos por contener la demanda de dólares ante las elecciones. Se han implementado medidas como el aumento de encajes a niveles históricos, intervenciones récord del Banco Central y mayores tasas de interés para desalentar la dolarización de carteras.
Finalmente, Milagros Gismondi, de Invecq, manifestó su asombro ante la presión generada por una elección provincial, argumentando que esta situación no influye en el Congreso ni en la gobernabilidad. Al referirse a la eliminación de la política de bandas cambiarias, la economista advirtió que esto establece una fecha de caducidad: «Post octubre habrá que recalibrar, parece inexorable».