Más allá de los mineros: una entusiasta repara ASIC y educa sobre Bitcoin a niños en Paraguay

Una nueva vocación en tecnología descentralizada
En solo tres meses de haber ingresado a Penguin Group en el área de microelectrónica, Lisa Vera, apasionada por las tecnologías descentralizadas, ha demostrado que su dedicación va más allá de los centros de datos. No solo se encarga del diagnóstico y supervisión de equipos utilizados para la minería de Bitcoin, sino que también ha hallado en la educación comunitaria una plataforma para compartir un conocimiento que considera esencial para el futuro de los niños.
“Conocí Bitcoin el año pasado, en un evento al que me invitaron. A partir de ahí dimensioné todo lo que es su tecnología y me interesé en ella”, narra Vera, quien cumple su labor en el centro de datos de Penguin. Su interés personal pronto se transformó en un compromiso activo con su comunidad.
Iniciativa educativa en Ko’e Rory
Lisa está llevando a cabo un proyecto educativo enfocado en los niños y jóvenes de Ko’e Rory, una localidad en el departamento de Alto Paraná, al este de Paraguay. Emplea métodos creativos para introducir conceptos financieros y tecnológicos de manera práctica y entretenida. “Automáticamente me enfoqué en la comunidad y en la necesidad que hay. Quiero que los más pequeños aprendan y conozcan esta tecnología”, señala.
En un entorno donde la educación financiera es escasa, Lisa ha identificado que la mejor manera de interactuar con los niños es a través de ejemplos simples. “Fue un poco complicado al principio, ya que tuve que explicarles cómo ganar dinero y cómo ahorrar. Desarrollé una técnica para captar su atención”, explica.
A través de dinámicas de ahorro, simulaciones de compra-venta y charlas adaptadas a su nivel, los niños no solo aprenden qué es Bitcoin, sino también cómo puede ser una herramienta para su independencia económica y soberanía financiera.
De la microelectrónica a la educación social
En Penguin Group, Lisa desempeña un papel clave en el área de microelectrónica, donde realiza la recepción de equipos, diagnóstico de fallas, derivación para su reparación y supervisión final. “El proceso en microelectrónica incluye la recepción, diagnóstico, reparación y verificación antes del despacho. Una vez detectada la falla, comienzo a gestionar su reparación. Después de eso, el equipo vuelve a mis manos para asegurarme de que funcione correctamente antes de ser enviado”, detalla.
Aplica este mismo enfoque sistemático en su labor educativa. Así como diagnostica las máquinas, también identifica necesidades dentro de la comunidad y propone soluciones, acompañando el proceso hasta que los conocimientos se transformen en habilidades prácticas. Su objetivo no se limita a la enseñanza básica sobre Bitcoin; busca fomentar una economía circular en Ko’e Rory.
Visión de futuro
“Mi meta a largo plazo es crear una economía circular, involucrando a toda la comunidad. Quiero que cada persona, no solo aquellos con negocios, adopte Bitcoin como una moneda estable y segura, que les otorgue soberanía, evitando depender de bancos que imponen limitaciones fuertes”, declaró Vera.
Con esta visión, aspira a que la comunidad reconozca que el acceso a nuevas tecnologías no es exclusivo de grandes ciudades, sino una oportunidad para el desarrollo local.
Impacto en el futuro de las comunidades
El trabajo de Lisa en Ko’e Rory pone de manifiesto una creciente tendencia en América Latina: la adopción de Bitcoin como alternativa para comunidades que desean independizarse del sistema financiero convencional. Iniciativas como la suya destacan que la educación es fundamental para que las nuevas generaciones comprendan temprano los beneficios de una economía digital.
Su mensaje va más allá de lo técnico; es profundamente humano: proporcionar herramientas para que las familias tomen decisiones financieras informadas y proyecten un futuro con mayor autonomía. Con pasión, compromiso y creatividad, Lisa Vera representa la fusión entre la precisión de la ingeniería y la sensibilidad de la educación comunitaria. En cada clase, en cada explicación ofrecida a los niños de Ko’e Rory, se manifiesta su convicción de que la tecnología solo tiene valor si se comparte y se transforma en una palanca de oportunidades para todos.