Larreta gana terreno a nivel nacional como líder de la oposición
La pandemia trajo cambios, no solo los evidentes dentro de la sociedad relacionados al trabajo, el humor, la confianza y la economía de los argentinos, sino también en la misma política. A principio de año, la idea de una mesa de diálogo y de toma de decisiones conjuntas entre Horacio Rodríguez Larreta y Alberto Fernández, era impensada. A pesar de que este acercamiento genera tensiones en el ala dura de Juntos por el Cambio, los argentinos reciben el mensaje de manera positiva y le transmiten al círculo rojo las características sociales de la nueva normalidad.
Las mediciones realizadas en los últimos dos meses a nivel nacional, demuestran un aumento en las imágenes positivas del presidente de la nación y del líder del PRO. Los analistas políticos relacionan estos máximos positivos a las acciones contrarias a la grieta que marcaban las relaciones partidarias pre pandemia: el diálogo, el consenso y las decisiones conjuntas son hoy las palabras superadoras.
La fuerte presencia que mantiene en CABA, el alto perfil en redes sociales y siempre presente en las conferencias de prensa nacionales, le dieron a Larreta un impulso en su carrera política, reforzando así su condición de gobernante, la independencia de Mauricio Macri y aumentando su caudal de seguidores.
Lo cierto es que a fines del año pasado existían algunos rumores que mencionaban una posible preparación del dirigente porteño hacia las elecciones del 2023. Hoy, con el camino despejado dentro de su propio espacio y con un alto nivel de aprobación social, es una idea que toma fuerza y lo posiciona como el representante de una oposición renovada.